Peruano. Defensor de Racing en 2003. Jugó 16 partidos.
Comenzó su carrera en las divisiones menores de Universitario, donde en el 2000 pudo debutar oficialmente en la primera división el 6 de febrero en el empate 0-0 ante Melgar.
En la Crema se quedó dos años ya que fue transferido al Cruz Azul, donde jugó sólo seis meses.
Para el Apertura 2003, Galliquio llegó a Racing de la mano de Angel Cappa, quien lo hizo jugar todos los partidos de ese torneo y en una posición que no era de su agrado. El peruano siempre se destacó en el puesto de marcador central, pero Cappa lo hacía jugar de lateral derecho.
El desempeño de Galliquio por la Academia fue de mayo a menor. Su nivel cayó notablemente por culpa de los viajes que hacía para jugar en la Selección y también lo perjudicó una lesión que lo alejó un par de jornadas.
Con la renuncia del “Bigotón”, llegó Ubaldo Fillol en su reemplazo en la dirección técnica y fue el mismo “Pato”, quien decidió prescindir de sus servicios.
Sin lugar en Racing, Galliquio regresó a su país para volver a vestir la camiseta de Universitario, del que partió en el 2005 para jugar un año en Universidad San Martín de Porres.
Al año siguiente regresó a la “Crema”, pero luego de unos meses fue transferido al Dinamo Buscarest de Rumania.
En enero de 2009 pegó la vuelta a Universitario, donde sigue jugando actualmente.
Con respecto al seleccionado de Perú, camiseta que defendió en 34 partidos, Galliquio fue marginado por el entrenador Sergio Markarián por desobediencia.
El defensor, junto a otros seleccionados, se escapó de la concentración y su destino fue el "Veneto Casino" que es conocido no sólo por los juegos de azar, sino por ser parte del “circuito de solteros” de la ciudad. Los diarios reprodujeron este escándalo y por ende, el entrenador de la selección se vio obligado a expulsarlo de la selección.
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